Mesón «La Ponderosa»: exquisita sencillez

Revistas, periódicos, programas de televisión, guías para gourmets…, todos, en uno u otro momento, han reseñado este local conquense como uno de los más renombrados del panorama nacional. Se ha escrito tanto y tan bien de este mesón que intentar redactar unas breves líneas sobre esta barra no deja de ser algo complicado. Redundaremos sobre lo ya escrito, seguro, pero esta barra se lo merece…¡y mucho!

Nos recibe Ángel Millán, su dueño y alma mater desde hace ya más de cuatro décadas. Vamos contrarreloj para la breve entrevista que hemos concertado con él pues sabemos que la barra en pocos minutos se pondrá a rebosar de parroquianos y visitantes que llegan para degustar sus excelentes raciones. Mientras vamos haciendo fotos departimos con él sobre la popularidad que ha tenido desde hace tanto tiempo y por haberse convertido en un referente gastronómico. «Siempre, siempre, las mejores materias primas, esa es la clave» nos responde Ángel, como si supiese con antelación que le vamos a preguntar sobre el porqué de ese éxito permanente a lo largo de cuarenta años.

Y es que en su mesón hay una máxima no escrita que se transmite como un mantra entre los que conocen este mesón y lo recomiendan a quienes todavía no lo han visitado: «¡Pidas lo que pidas, te va a encantar!». El revuelto de la casa, los tomates, la oreja a la plancha, las mollejas de cordero, los espárragos trigueros…, uno no sabe qué elegir, pero sea cual sea la elección, nunca fallarás, y eso ya lo dice todo. Cerveza de barril y excelentes vinos (con más de veinte referencias de Vega Sicilia y lo más granado de las bodegas castellanomanchegas) acompañan como espléndido maridaje.

Hay personas que se sorprenden de que este mesón no disponga de mesas, pero no se dan cuenta de que, si tuviese este tipo de mobiliario, ya no sería «La Ponderosa» y, posiblemente, tendrían que esperar días hasta poder reservar, así que…¡alegrémonos todos!

Bienvenidos los amantes joviales de la bebida y la comida, para quienes esperan la sorpresa en las recetas sencillas cocinadas con un soberbio punto de elaboración. Bienvenidos a los entusiastas y devotos del buen comer.

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